Las perogrulladas que dijo Pero Grullo
Todos hemos dicho u oído alguna vez una perogrullada (verdad o certeza que, por notoriamente sabida, es necedad o simpleza el decirla, según el drae). Algunos ejemplos serian: "el agua moja", "si hace frió es porque no hace calor", "la bitácora del Yayo es la mejor del mundo", "mañana amanecerá" y el impagable cartel cuya foto os pongo a continuación:
¿Y por qué las llamamos perogrulladas?. Todo parece indicar que el término hacer referencia a Pero Grullo, un personaje popular (ficticio o no) que era muy aficionado a soltar peroratas inmensas en las que al final no sacabas nada en claro, solamente un montón de cosas que ya sabias dichas de forma enrevesada, osease, perogrulladas. La invención de la palabra en si se le atribuye a veces a Quevedo, que en uno de sus escritos satíricos llamado "La visita de los chistes" habla con el propio Pero Grullo que le descubre diez profecías repletas de obviedades. Pero en realidad en el texto aparece solo "grulladas", no perogrulladas. No obstante merece la pena comentar algunas de las cosas que el tal Pero Grullo le dice a Quevedo: "Si lloviere hará lodos,/ y será cosa de ver /que nadie podrá correr/ sin echar atrás los codos". "Volaráse con las plumas, /andaráse con los pies, /serán seis dos veces tres." Pero lo mejor es cuando Quevedo le achaca que todo lo que esta diciendo no son mas que necedades y verdades que todo el mudo sabe, a lo que Pero Grullo le responde: Diréis que de puro verdad es necedad: ¡buen achaquito, hermanos vivos! La verdad así decís que amarga; poca verdad decís que es mentira, muchas verdades que es necedad. ¿De qué manera ha de ser la verdad para que os agrade?. Todo un cachondo este Pero Grullo.
Pero aun tenemos una mención mucho mas antigua de este personaje. En 1460 un escritor desconocido llamado "El Evangelista" escribe un relato en el que un tal Pedro Grillo (indudablemente precursor de Pero Grullo), expone un profecía apocalíptica decorada con lindezas como estas:
Luego harán relámpagos y truenos, que no habrá hombre nacido que quede por nacer. Luego hará un terremoto tan espantable, que los muertos no osarán resucitar de miedo; los corazones estarán todos en los cuerpos, que no osarán asomar; los puerros y los ajos meterán las cabezas so tierra, y no osarán salir hasta que salgan canos; el azafrán y zanahorias y membrillos se tornarán amarillos de miedo. Las mujeres serán todas hembras; los mudos se mirarán unos á otros callando, que no habrá sordo que los oiga. El fuego se tornará caliente, que llegando las estopas, se encenderán; la tierra se calentará tanto del gran sol, que los ahorcados no osarán llegar los pies al suelo.
Las piedras se tornarán todas duras como cantos; los caminos estarán tendidos por el suelo; los rios correrán hácia ayuso; la mar se tornará toda agua, de manera que echando en ella una piedra y aun dos, no pararán hasta el suelo. Las montañas serán más altas que los llanos, de guisa que más se cansarán cien hombres por una montaña arriba, que no uno cabalgando por el llano. Todas las alimañas no tendrán más sentido que bestias, todas llenas de pelos; las aves llenas de plumas; las golondrinas todas de una color, que no se conocerán la una á la otra; á los mochuelos se les tornarán las cabezas de hechura de cebollas, con dos cuentas de ámbar en la cara.
Puede parecer chiste, pero yo he oído a algún que otro político dando un discurso que no tiene nada que desmerecer a este.
Aquí os dejo mi intervención sobre esta entrada en el programa "Maneras de vivir" de "Radio Mislata". Para oírla solo tenéis que pulsar el botón de play.