Mamotreto
Siempre hay quien tacha mis entradas de excesivamente largas por lo que hoy voy a intentar redimirme con un entrada mas corta de lo normal, a ver si lo consigo y no me sale un mamotreto como de costumbre. Y de eso mismo vamos a hablar, del origen de la palabra "mamotreto". Sí, origen en singular, ya que como muestra de mi voluntad de ser breve he escogido una palabra de la que solo he encontrado una versión de su origen, aunque parezca increíble.
Usamos mamotreto para referirnos a un libro grande y voluminoso y también cuando hablamos de un armatoste o algo aparatoso y monstruoso. Un ejemplo del uso de mamotreto nos lo encontramos en la prensa canaria cuando hablan de este edificio inacabado, creación a partes iguales de la especulación inmobiliaria y de la crisis posterior.
Pero esta palabra con la que definimos algo tan feo tiene un bonito origen, procede de la palabra latina mammothreptus que a su vez viene del griego μαμμóθρεπτος. Palabra que a su vez podemos dividir en μαμμó (mammo) que significa abuela, y en θρεπτος (threptus), criado o alimentado. Uniéndola tenemos "alimentado por su abuela", y hacía referencia a la creencia de que los niños criados por sus abuelas eran especialmente mimados y sobrealimentados, lo que les llevaba a tener un tamaño y gordura considerables. Desde aquí el recorrido es claro, primero se uso para definir a personas gordas, luego a cosas grandes y finalmente a libros gruesos.
Curiosa la lista de libros que han pasado por esta bitácora, ademas de estos libros criados por sus abuelas hemos hablado de libros que son un señor, de libros en pañales, y hasta del libro de los libros en verso.
Y como despedida una foto de un "libro gordo" al que le tengo especial cariño.