Bitácora de un carpetoedetánico curioso donde van a parar todos los conocimientos aparentemente inútiles.

Sígueme en las redes para no perderte nada

lunes, 19 de mayo de 2014

Una entrada sesquicentenaria en el tercer aniversario de esta Memoria Residual


Hace ya algún tiempo (seguramente demasiado) publique mi entrada numero cien con el descriptivo titulo de "Memoria Residual cumple cien entradas". En ella publique una pequeña selección de diez entradas de las publicadas hasta la fecha. Hoy, casi dos años y medio después, llego a mi entrada 150 (osease, sesquicentenaria, por cierto hablaré de esta palabra mas adelante) y lo conmemoro con este post en el que también haré una pequeña selección. ¿Y por que 150 y no 200?, pues por que hace un montón de tiempo de esas cien, y me apetecía hacer una de esas entradas de corta y pega.

Hablando en serio, para llegar a las primeras cien tarde siete meses, para hacer estas cincuenta he tardado ¡Veintinueve meses!. Y esto se explica no solo porque ahora las entradas son mas elaboradas y por ello mas espaciadas en el tiempo, si no sobre todo porque ha pasado por largos periodos de inactividad. Ahora mismo me encuentro en plena reanudación (mes y medio) tras un parón de casi ocho meses, y no esta de mas esta entrada para recordar las alegrías que me ha dado el embarcarme en esta aventura. Estoy a punto de llegar a las ochenta mil visitas, en varios temas mis posts están en las primeras posiciones de google y otros buscadores, en fin, aunque tenga pocos comentarios sé positivamente que hay gente al otro lado, y eso me llena de alegría y deseos de seguir adelante.

Y aun hay otro motivo, si sumáis meses vereis que esta humilde bitácora acaba de cumplir tres años, concretamente cuando escribo esto, tres años y tres días. Por lo tanto buen motivo la doble celebración para publicar esta lista de cinco entradas de las últimas cincuenta que selecciono por las razones explicadas a continuación:

- "El antiguo y absurdo sistema monetario ingles": por ser la mas visitada de estas cincuenta.

- "Napoleón y la Nocilla": por que además de ser una historia sencilla me permití la licencia de contarla al reves, y creo que no me salio del todo mal, perdoneseme la inmodestia.

- "Hablando de gallinas ¿sabias que..?": por ser un texto que publique en el llbret de mi falla (Falla Noscarmientas), cosa que me hizo especial ilusión.

- "¿Es posible juzgar a Dios?": esta entrada y las dos que le sucedieron (II y III) forman una trilogía, siendo la única de esta bitácora.

- "Una guerra nada corriente": no solo por que cuenta una anécdota histórica muy interesante y reveladora, sino por que además uno de sus protagonistas es un personaje a descubrir, quizás el inventor mas influyente de todos los tiempos, aunque fueron otros los que se llevaron al fama. Me estoy refiriendo al gran Nikola Tesla.

Y para que nadie diga que no aporto nada nuevo hablare un poquito sobre la palabra "sesquicentenario", palabra  a a que le tengo especial cariño ya que la descubrí hace un montón de años leyendo el precioso cuento largo del gran Asimov, "El hombre bicentenario". Cuando el robot protagonista cumple ciento cincuenta años celebran un evento llamándole "el robot sesquicentenario", como podéis suponer corrí raudo al diccionario a ver que significaba esa palabra tan larga. El prefijo "sesqui-" viene del latín y significa "uno y medio", y se puede usar con mas cosas, por ejemplo sesquihora seria hora y media. Investigando sobre este prefijo me encontré con "sesquipedalismo", que viene a significar algo así como "pasoymediolismo" y perdón por el "palabro". Este término se usa para definir la costumbre tan arraigada en los medios de comunicación de alargar las frases mas de lo necesario, como decir "precipitaciones en forma de lluvia" en vez de lluvia a secas, o "funcionalidad" y "obligatoriedad" en vez de "función" y "obligación". En fin un defecto que lleva a la complicación innecesaria del lenguaje así como a la cursileria mas galopante, defecto que conviene evitar aunque me temo que yo habré incurrido en él varias veces a lo largo de estas ciento cincuenta entradas.

Y corto ya que sino me va a salir una sesquientrada. Gracias a todos por aguantarme y espero no tardar tanto en llegar a mi entrada numero doscientos.

jueves, 15 de mayo de 2014

Ferrari y el Cavallino Rampante


Ferrari. Con solo oír este nombre se nos llena la imaginación de coches lujosos, carreras de Fórmula 1, un color rojo intenso y la figura imponente del Cavallino Rampante. Y precisamente de este "caballo rampante" y de su origen es de lo que versa la entrada de hoy. Y para ilustrarla un foto de sus primeras apariciones en público.

Francesco+Baccara+caballo+rampante+Ferrari+avion

Ese señor uniformado que vemos delante de nuestro protagonista es Francesco Baracca, as de la aviación italiana en la Primera Guerra Mundial. Se le atribuyen hasta treinta y cuatro victorias aéreas y es considerado unos de los grandes héroes de la historia de Italia. Como vemos en la foto lucia en su avión la imagen un caballo rojo (aunque en la foto salga en blanco y negro) sobre una nube blanca. Según la leyenda tomó esta insignia del enemigo derrotado en su victoria número quince (este número no es casualidad, a partir de la decimoquinta victoria un piloto era reconocido como as de la aviación), seguramente un alemán de Sttugart, ciudad con un escudo muy parecido. Baracca fue derribado y muerto en junio de 1918 y sus orgullosos compañeros de escuadrilla tomaron el caballo como símbolo propio, cambiando el color rojo original por el negro en señal de duelo.

Damos un saltito en el tiempo y nos encontramos en 1923 cuando Enzo Ferrari empieza a deslumbrar a los aficionados al automovilismo a bordo de su Alfa Romeo. Y  entre sus mayores fans encontramos a la familia del mal logrado píloto italiano. Tanta es la devoción por el joven piloto que la madre de Francesco Baracca le da permiso a Enzo para usar en su coche el símbolo de su hijo. Ferrari acepta el honor sin dudar, y lo adopta como símbolo propio con alguna pequeña modificación, respeta el negro en lugar del rojo en señal de duelo, cambia el fondo blanco por el amarillo de Modena (su ciudad) y le levanta la cola (dicho sea sin animo de ofender). Había nacido el mítico Cavallino Rampante.

Farrari+caballo+rampante+escudo+cavallino

Una curiosidad añadida, si recodáis el escudo de Porsche veréis que tiene un caballo muy parecido a este, pues no solo es muy parecido, es el mismo caballo. Porsche toma este escudo del de Sttugart (su ciudad de creación), que como recordareis es la ciudad del piloto derribado por Francesco Baccara. Como siempre las paradojas del destino nos sorprenden y las dos grandes compañías de deportivos de lujo comparten escudo gracias a una batalla aérea. Cosas veredes amigo Sancho...

lunes, 5 de mayo de 2014

El Quijote de Avellaneda


"Nunca segundas partes fueron buenas", la primera vez (probablemente) que se escribió esta frase fue, paradojicamente,  en una segunda parte. En el capitulo 4 de la segunda parte del Quijote el bachiller Sansón Carrasco pronuncia esta frase cuando esta debatiendo con don Quijote y Sancho la posibilidad de que Cervantes escriba una segunda parte de las aventuras del caballero, si, esa segunda parte en la que los tres se encuentran. Una manera peculiar del escritor de promocionar su obra, aunque quizás cuando habla de segunda parte no se refiera a esa misma en la que el lector se encuentra inmerso si no a "la otra" segunda parte que se publicó meses antes que esta, el llamado "Quijote de Avellaneda", o mas correctamente "Segundo tomo del Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha, que contiene su tercera salida y es la quinta parte de sus aventuras".

Quijote+avellaneda+cervantes+apocrifo


En 1614, tras la buena acogida por el público de "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha" aparece una segunda parte firmada por un tal Alonso Fernández de Avellaneda, que no solo no tiene nada que ver con el manco de Lepanto, si no que incluso aprovecha el prólogo de su obra para vilipendiar  a placer al insigne escritor. No cabe duda que este Avellaneda no existió, y dicho nombre no es mas que un seudónimo bajo el que se escondía algún escritor de la época, pero ¿cual? al día de hoy aun siguen las elucubraciones sobre su identidad, aunque va cogiendo fuerza la figura de Lope de Vega, reconocido enemigo de Cervantes, bien como autor material del libro, bien como impulsor y benefactor de este. Una frase del mencionado prólogo ya nos pone en la pista de que el Fenix de los Ingenios debe de estar detrás del libro de una manera u otra: "...pues él tomó por tales el ofender a mí, y particularmente a quien tan justamente celebran las naciones más estranjeras y la nuestra debe tanto, por haber entretenido honestísima y fecundamente tantos años los teatros de España con estupendas e inumerables comedias, con el rigor del arte que pide el mundo y con la seguridad y limpieza que de un ministro del Santo Oficio se debe esperar." Creador de innumerables comedias y ministro del Santo Oficio.. dos mas dos, cuatro.

Como curiosidad añadida comentar que hasta en dos ocasiones aparece este "Quijote de Avellaneda" en la segunda parte del verdadero don Quijote. En el capítulo 59 mientras don Quijote y Sancho están en un posada oyen en la habitación contigua como dos caballeros hablan de la segunda parte del Quijote. Rápidamente irrumpen en la habitación y desmienten que las andanzas que se cuentan en dicha novela sean las suyas. Es mas, informado por sus interlocutores que que el personaje de Avellaneda vivió aventuras en las justas de Zaragoza el propio don Quijote decide abandonar su pretensión inicial de dirigirse a la ciudad aragonesa y decide que ira a Barcelona, como efectivamente sucede después.

También casi al final de la novela, concretamente en el capítulo 72, aparece Álvaro Tarfe, personaje importante en el Quijote de Avellaneda. Cuando el ingenioso caballero se percata de su presencia se presenta ante él diciendo que es el autentico don Quijote. El de Tarfe lo reconoce como tal y admite que los que él conoció fueron impostores, reconociendo por escrito ante el alcalde dicha confesión.

Otra cuestión reseñable es que en la segunda parte es cuando Cervantes fija como verdadero nombre de don Quijote el de Alonso Quijano, seguramente para desmentir el de Martín Quijada que le atribuye Avellaneda en su obra.

Y finalizo esta entrada, esperando que haya "Avellanedas", no para criticarme como autor sino para escribir segundas o terceras partes de esta historia en los comentarios pertinentes.

lunes, 21 de abril de 2014

Hablando de gallinas, ¿sabias que...?


Hoy reproduzco (en castellano) un texto sobre frases hechas de gallos y gallinas que escribí para el llibret de mi falla, Cádiz - Cura Femenia - Puerto Rico, falla Noscarmientas.

gallo+gallina+huevo+llibret+noscarmientas+falla

-¡Che nano!, ¿Has visto este año de que va la falla?  “Gallina vella da bon caldo” y hala, toda la falla llena de gallinas y gallos.

-Pues el tema de gallos y gallinas da para muchas cosas interesantes, por ejemplo esa frase que sirve de lema de la falla no solo se usa en español, también en italiano, como nos demostró el gran Valentino Rossi cuando en 2009 ganó su noveno título mundial con 30 años no lo dudo y se enfundó una camiseta en la que se podía leer Gallina Vecchia da boun brodos que como puedes imaginar se traduce como “gallina vieja da buen caldo”.

-Pues si con 30 años es viejo ¿Qué somos tú y yo? Mejor no me contestes. Lo que me estoy dando cuenta es que otra frase sobre las gallinas, el llamárselo a alguien cuando es un cobarde, también se usa en ingles, o por lo menos eso parece viendo películas americanas.

-Razón tienes amigo mío, en inglés “to be a chicken” se usa para tachar a alguien de cobarde o pusilánime. Pero curiosamente “to play chicken” significa jugar a ver quién es más chulo.

-No me parece tan raro, en español usamos ser un gallo o un gallito para referirnos a alguien que es chulo y altanero. Ya sabes lo que siempre se ha dicho del sexismo del idioma, ser gallina es malo y ser gallito es bueno.

-Sin embargo en el tema de las definiciones de gallo y gallina se podría decir que antes se era más feminista. En el actual diccionario de la Real Academia si buscas gallo encuentras “Ave del orden de, bla, bla bla…” y en gallina puedes leer “Hembra del gallo que tal y tal y tal”, sin embargo en el diccionario de Autoridades, el primero que se hizo allá por el XVIII, en gallina es donde pone “Ave domestica que tal y cual…” y el gallo queda relegado a “Macho de la gallina…”

-Y no olvides que quien se va a la cama pronto se “acuesta con las gallinas” pero el que madruga “se levanta con el gallo”.

-Y ya metidos en el tema hay muchas más frases hechas que hacen referencia a gallo y gallinas. Por ejemplo ¿sabes por qué se dice lo de “se ha quedado como el gallo de Morón, sin plumas y cacareando”?

-No, pero conociéndote me temo que lo voy a saber en pocos segundos.

-Como decía Loquillo “mi fama me precederá…”, pero bueno a lo que íbamos. Nos encontramos en Morón de la Frontera, Sevilla, en los albores del siglo XVI. Parece ser que las aguas estaban turbias por las constantes y violentas disputas entre los moronenses, por lo que desde Madrid se decidió nombrar a un nuevo juez que tenía fama de duro. En cuanto llegó al pueblo comenzó a impartir justica con severidad y algo de chulería, repitiendo una frase que le daría fama, “donde manda este gallo no manda otro”, hasta que un buen día los paisanos  decidieron ya estaba bien, se fueron a por el susodicho y lo desnudaron y apalearon, dejándolo de esta guisa en la plaza del pueblo. Dado el carácter andaluz no tardaron en cantarse sarcásticas coplillas comentando la jugada como: “Te vas a quedar como el gallo de Morón sin plumas y cacareando en la mejor ocasión”.

-Hummm, una explicación tan interesante como larga, por lo menos ha sido clara, que a veces tu verborrea se convierte en un autentico galimatías que no hay quien lo entienda.

-¡Galimatías! Me encanta que me preguntes por el origen de esa simpática palabra, porque también tiene que ver con los gallos.

-Yo no te he preguntado nada, pero bueno, dispara.

-Un posible origen de la palabrilla viene de la época en que los litigios se llevaban en latín. El señor Matías, un pequeño granjero, estaba en disputa sobre la posesión de un gallo, y su abogado, en su enfervorecido y enrevesado alegato, empleó montones de veces la frase "el gallo de Matías", lo que en latín seria "gallus Mathías". Tantas veces repitió la frasecita que al final se tomo a guasa, y simplificada como galimatías llegó a ser empleada para definir cualquier discurso de difícil comprensión.

-Mira, esa historia sí que me ha gustado. Yo me sé la de la gallina más famosa de todos los tiempos, la gallina de los huevos de oro. Según recuerdo era una fabula de Esopo en la que un granjero descubrió que tenía una gallina que ponía huevos de oro. El granjero, víctima de su codicia, decidió matarla creyendo que su interior habría un gran lingote oro, pero al abrirla en canal descubrió que solo había sangre y vísceras. Ya se sabe, la avaricia rompe le saco.

-Ha estado bien traída, obviamente me la sabia, pero me alegro que a ti también te guste contar historietas de estas.

-¡Hombre, yo no soy tan empollón como tu pero algo se!

-¿Empollón yo?, pues mira el termino empollón también tiene que ver con las gallinas. Imagínate la postura de alguien estudiando, la cabeza gacha sobre los libros y pasando largos ratos así ¿no te recuerda a una gallina empollando sus huevos? Además, rizando el rizo, podríamos decir que empollando el huevo del estudio conseguiremos los pollos del conocimiento.

-¡Chúpate esa!, la verdad es que al final que llegas a aburrir, pero hasta ese punto da gusto oírte.

-Tomare eso como un cumplido, pero ahora mismo me están viniendo muchas frases a la cabeza con gallos y gallinas. “Oyó el gallo cantar y no sabe en qué muladar”

-“En menos que canta un gallo”

-“Eso no lo cogen ni las gallinas”

-“Me siento como gallina en corral ajeno”

-“Cuando meen las gallinas
-“Soltar un gallo”

-“El que solo come su gallo, solo ensilla su caballo”

-“Gallo que canta algo tiene en la garganta”

-“Otro gallo me cantara”

-“Beber al gallo”

-Meeeeck, escuchemos la voz de los supertacañones.

-Che, ¿a qué viene eso? Es una frase de gallos.

-Pero no exactamente, beber al gallo no tiene nada que ver con los gallos de los que estamos hablando. Es una deformación de “beber al gallete”, o más exactamente de cómo lo decimos en valenciano “beure al gallet”, y gallete o gallet, como te digo, no tiene nada que ver con los gallos. Gallete es la garganta, o más exactamente el final de la boca y decimos beber al gallete porque cuando lo hacemos el chorro del liquido cae exactamente en él.

-¡Mira! se me pone la piel de gallina solo de oírte, o igual es del frio que hace aquí en mitad de la calle, me parece que me voy a casa, ya se sabe, cada gallina en su gallinero.

-Interesante lo de piel de gallina, se dice así porque parece la piel de una gallina desplumada, pero lo curioso es el porqué se nos pone la piel así cuando tenemos frio, miedo u otra sensación fuerte. Es un reflejo arcaico…

-Huyyyy parece que se está nublando, como nos descuidemos nos vamos a mojar como pollos, adiós, adiós.

-Pero no te vayas ahora, que te tengo que explicar lo de la piel de gallina.

-Otro día. U otro año, que me he dejado la comida en el fuego, adiós.

-Pero ¿te estás yendo de verdad?, ¡¡¡¡La piel de de gallina es porque se nos erizaba el pelo cuando éramos peludos como monos!!!!, será posible ¡¡¡así parecíamos mas grandes y asustábamos a nuestros enemigos!!! y también nos servía ¡¡¡ para que el pelo nos calentase más!!!. Hala, ya se la he contado, a mi me va a dejar este con una historia a medias. ¡¡¡Adiós, otro día seguimos!!!

martes, 15 de abril de 2014

Ni quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor


Documentandome para la entrada sobre Pedro I el cruel /justiciero me tope con la historia del origen de esta conocida frase y decidí guardármela para la siguiente entrada, pero como se cruzó en el camino la audaz Ana Maria de Soto tuve que cederle el paso caballerosamente, y retrasar esta cínica frase para una posterior entrada, que da la casualidad que es esta entrada.

Empecemos nombrando a los protagonistas de esta cruenta historia de luchas fratricidas. Primero tenemos al ya mencionado Pedro I de Castilla, frente a él su hermanastro y ancestral enemigo, Enrique de Trastamara, que luego pasaría a ser Enrique II de Castilla, y como tercero en discordia el "pronunciador" de la frase, Berdtrand du Guesclin.

bertrand+du+guesclin+compañias+blancas+pedro+enrique

Como contamos en la entrada de Pedro I este mantuvo guerras con medio mundo, pero la principal fue contra su hermanastro Enrique, que pugnaba por hacerse con el trono de Castilla apoyado por multitud de nobles deseosos de no perder sus privilegios. Entre las huestes del pretendiente se encontraban las temibles "Compañías Blancas" comandadas por Bertrand du Guesclin, un ejercito de mercenarios que recorrían Europa vendiendo sus brazos y espadas al mejor postor. 

En el trascurso de la guerra entre hermanos se libró una batalla en las cercanías del Castillo de Montiel, en la que Pedro I sufrió una dolorosa derrota, teniendo que refugiarse en dicho castillo. Viéndose derrotado intento acercarse a du Guesclin para intentar pasárselo a su bando, y para esto mandó a uno de sus mas fieles servidores, Men Rodriguez de Sanabria, que intenta comprar al francés ofreciéndole villas y territorios. Este parece aceptar la oferta y concierta una cita con el rey en su tienda. Pero cuando Pedro I se presenta allí se encuentra con que esta su hermano Enrique esperándolo. Rápidamente desenfundan sus dagas y se enfrentan en una cruel pelea a muerte. Pedro lleva la iniciativa y derriba a su hermano cayendo sobre él dispuesto a acuchillarlo, pero en este momento interviene du Guesclin y tras pronunciar solemnemente la frase por la que pasaría a la posteridad "Ni quito ni pongo rey. pero ayudo a mi señor", agarra a ambos contendientes de los pies y  les da la vuelta dejando a Enrique en mejor situación, situación que no dudaría en aprovechar para hundir mortalmente su daga en el corazón de su hermano.

Espero que os haya gustado la entrada y me dejéis algún comentario, ya conocéis el famoso dicho "Ni quito ni pongo blog, pero ayudo al blogueador".

lunes, 7 de abril de 2014

La primera "marine" de la historia


En realidad no era marine, si no Infante de Marina, pero el término marine es el que mas rápido entendemos todos por la abrumadora influencia de las películas americanas. Pero nuestra protagonista de hoy era infante de marina del primer cuerpo de estas características que existió en el mundo, el español, por supuesto. En 1537 Carlos I asigna permanentemente algunas compañías de los tercios españoles a las compañías de galeras, creando la Infantería de Armada compuesta inicialmente por el Tercio Nuevo del Mar de Nápoles. Rápidamente se añadieron mas Tercios pero el escudo de ese primer tercio es el que pasaría a usarse por toda la Infantería de Armada.
infanteria+marina+armada+española+marine
Ahora daremos un pequeño salto en el tiempo y nos vamos a 1793. La antes poderosa Armada española va perdiendo efectivos y eficacia a marchas forzadas pero aun así numerosos jóvenes aun se incorporan a sus filas esperando gloria y fortuna, ademas de conocer mundo mas allá de sus pequeños pueblos. Y uno de estos jóvenes es un tal Antonio Maria de Soto, que a sus dieciséis años abandona su pequeño pueblo de Aguilar en Córdoba para dirigirse a San Fernando y alistarse en la Infantería de Marina. Tras la instrucción es embarcado en la Fragata Mercedes y comienza su carrera militar

En un buen puñado de batallas pudo demostrar nuestro héroe su valentía y arrojo en el combate. Participó en los combates de Bañuls. Estuvo presente en la batalla de Rosas, donde se llevo un evacuación de la ciudad al estilo de Dunkerque. También estuvo en la dolorosa derrota del cabo de san Vicente. Posteriormente su fragata se trasladó a Cádiz donde fue escolta del Santísima Trinidad, el barco mas imponente y poderoso del época. Allí sufrió una nueva derrota y la fragata de nuestro protagonista tuvo que salir de allí escoltando a la joya de la armada española que había sido gravemente alcanzada por los cañonazos de los barcos británicos. En seguida se organiza la defensa de la ciudad al mando del general Manzarredo. Este consigue hasta un total de 136 lanchas cañoneras a las que dota con miembros de la Infantería de Marina, entre ellos el propio Antonio de Soto. La rapidez de estas lanchas producen grandes daños en las flota británica comandada por Nelson y finalmente consiguen hacerla huir de las costas de Cádiz.

Tras esta defensa llegan unos meses de tranquilidad y el bueno de Antonio es trasladado a la fragata Matilde, donde pasa el tiempo entre guardias y vigilancias. Pero el 7 de julio de 1798 surge la sorpresa, el infante Antonio pasa un examen medico rutinario y se descubre ¡que en realidad era una mujer! El general Mazarredo es informado y da orden de que desembarque entre el asombro y la admiración de todos sus compañeros y jefes. El uno de agosto Ana Maria de Soto (este era su verdadero nombre) obtiene la licencia absoluta.

El propio general da cuenta de la historia a Carlos IV y enterado este de la heroicidad de esta mujer, la acrisolada conducta y singulares costumbres con que se ha comportado durante el tiempo de sus apreciables servicios, le otorga una pensión vitalicia de dos reales de vellón, le da el cargo de sargento primero y es autorizada para que en los trajes propios de su sexo pueda usar de los colores del uniforme de Marina como distintivo militar

Una historia mas que nos demuestra dos cosas ya sabidas pero que no esta de mas recordar. Primera el no por repetido menos cierto "querer es poder". Y segunda que en España tenemos mucha historia de la que sentirnos orgullosos.  

lunes, 31 de marzo de 2014

Pedro I de Castilla ¿cruel o justiciero?


"En este mundo traidor nada es verdad ni mentira, todo es según el color del cristal con que se mira".

Hace casi dos años (como pasa el tiempo), iniciaba con esta frase una entrada sobre Napoleón y el comienzo de sus "Cien días". Y hoy no puedo menos que recordarla al hablar de Pedro I de Castilla, conocido como el Cruel por sus enemigo y como el Justiciero por sus partidarios. Como veis el color del cristal siempre esta presente.
Pedro+I+cruel+justiciero+zapatero+candil+cabeza

En esta humilde entrada no voy a glosar la vida y obras del monarca, ya que su azarosa vida y reinado darían para multitud de paginas, me limitare a contar dos pequeñas anécdotas, a caballo entra la historia y la leyenda que ilustraran las dos caras del rey, la crueldad y la justicia. Solo un pequeño apunte histórico sobre el personaje. Pedro I de Castilla reinó del 1350 al 1369 y en estos diecinueve años estuvo en guerra prácticamente contra todo el mundo, su hermanastro, los nobles castellanos, Aragón, Francia, Portugal, Navarra, Granada. Pero la clave de su reinado es la lucha contra los nobles por defender el poder de la monarquía frente a los privilegios feudales. Por eso se ganó el apoyo de las ciudades y el pequeño clero que veían en el rey un freno a los desmanes de la aristocracia. Así la crueldad de la que le acusaban los nobles enemigos al castigar sus insurrecciones era vista como justicia por las clases bajas ya que se cebaban sobre sus enemigos habituales.

Pero vayamos con la primera anécdota en la que veremos su imagen de cruel. Cuentan que en  Sevilla el alcalde se pavoneaba ante el rey de que en su ciudad no había crimen que no fuese castigado, a lo que el monarca respondió que eso habría que comprobarlo. Y como no le faltaban arrestos para comprobarlo por si mismo, ni enemigos con los que cometer el crimen se lanzó a la calle embozado en la celebre capa española. Y efectivamente no tardó en encontrarse con uno de sus múltiples adversarios, el hijo del conde de Niebla. No tardo en provocar el duelo y el infortunado noble murió sobre los adoquines de la sevillana calle. Pero con lo que el rey no contaba es con  una anciana que lo observó desde su casa a la luz de un candil. La anciana pudo conservar el silencio y el animo durante la pelea pero no así cuando el asesino abandono el lugar del crimen con unos curiosos andares que hacían entrechocar sus rodillas produciendo un ruido característico ¡El asesino era el mismísimo rey de Castilla!. El susto que se llevo la pobre señora hizo que se la cayera el candil a la calle y huyó rápidamente a esconderse entre sus sabanas. Las pesquisas sobre el incidente empezaron inmediatamente y los restos del candil no tardaron en señalar a la anciana como testigo del asesinato. Interrogada con severidad no conseguían que la vieja abriese sus labios a pesar de amenazarla con terribles tormentos. Finalmente el rey intervino proclamando que colocaría la cabeza del asesino en la misma calle donde se cometió el crimen. El mismo volvió a interrogar a la asustada anciana y esta pidió un espejo y que los dejaran a solas. Cuando solo quedaban ella y el rey le puso el espejo delante de la cara y le dijo "Aquí tenéis a vuestro asesino". A las pocas horas el rey entrego una caja de madera al alcalde de Sevilla con la orden de que se colocase en el lugar del crimen y no se abriese hasta su muerte. Cuando por fin la abrieron encontraron un busto de piedra del monarca, con lo que el rey había cumplido "a su manera" con la promesa. Hoy en día aun sigue habiendo un busto del rey en aquella calle (aunque es una copia del siglo XVII) que recibe el nombre de "calle del rey don Pedro", y enfrente mismo está la calle donde vivía la anciana, que recibe el nombre de "calle Candilejo". La imagen que ilustra esta entrada es la de dicho busto.

Pasemos a ver su imagen de justiciero. Seguimos en la ciudad de Sevilla, no sabemos si antes o después que el incidente de la cabeza. El archidiácono de la catedral y un humilde zapatero mantenían un dura discusión, seguramente sobre el cobro de algún trabajo, que el clérigo zanjó clavando un puñal en el corazón del pobre artesano. El asesinato pasó a manos de la justicia, pero por su posición lo juzgaron miembros de la iglesia, que redujeron al pena a la ridiculez no decir misa durante un año. El hijo del zapatero clamó justicia pero nadie le hizo caso, no obstante sabiendo que estaba el rey en la ciudad consiguió una audiencia con él y le expuso el caso. El rey le dijo, "¿Tu serias capaz de matar al archidiacono?", "Por supuesto majestad", "Pues hazlo que yo me encargo del resto". En medio de una  procesión el hijo del asesinado salió de entre la multitud y sin dudarlo dos veces mato al asesino de su padre. Fue rápidamente apresado y mientras era llevado ante la justicia el rey intervino "¿Porque has matado a este hombre?", "Por que mató a mi padre" dirigiéndose a las autoridades eclesiásticas el rey preguntó "¿Por que no fue castigado el archidiácono por este crimen?", "Si que fue castigado, se le prohibió decir misa durante un año", el monarca se volvió ante el acusado y le dijo ceremoniosamente " Según tengo entendido tu eres zapatero, así pues te condeno a no fabricar zapatos durante un año". 

Esta segunda anécdota me parece sencillamente deliciosa. Como ya he dicho no se sabe si estas historias son verdad o leyendas creadas por sus enemigos y sus seguidores, pero como ya saben los habituales de esta bitácora,  "Se non è vero è ben trovato"